lunes, 13 de mayo de 2013

Todo cambia


Hemos crecido con un ideal de familia estilo postal donde esta mamá, papá, hermanos… y nuestros otros familiares como los abuelos, tíos y primos, este es el modelo que por años se ha mantenido vigente, el que nos han inculcado toda la vida.



Desde chicos se nos dice que un día haremos nuestra propia familia, de una u otra forma eso esperamos y es nuestra meta. Podernos reunir en navidad en casa de los abuelos, compartiendo con los primos y resto de familia.

Pero ¿qué pasa hoy? Que me ha tocado formar mi familia y no logre el modelo que me enseñaron. Cabe señalar que no soy la única, hay miles y miles de casos en que el modelo familiar ha sido alterado, yo creí que nunca estaría en esa lista, pero heme aquí formando parte de un nuevo modelo familiar donde es probable que un niño tenga dos mamas, dos papas (el papá biológico y quizás una futuro compañero de vida)o tal vez solo dos papas, otros hermanos, donde tus amigos son sus tíos, los hijos de tus amigos son sus otros primos, donde las reuniones “familiares” ya no son con la familia sino con otras personas porque no te llevas con tu familia.

No sé en qué momento me perdí, lo cierto es, que es un hecho, quizás debamos  ver o aprender un poco del pasado.

Vemos parejas de señores celebrar sus 50 o 60 años de casados y decimos “Yo quiero ser así” pero ¿qué han hecho ellos para lograr tanto? Creo que han tenido tolerancia, cosa que hoy los jóvenes ya no tenemos, en el momento que se nos presenta un problema con la pareja lo primero que decimos “No mi hijito cada quien por su lado”; también creo que tenían respeto mutuo, hoy eso no es más que una palabra en el diccionario, porque lo que hacemos es agredirnos mutuamente;  también había paciencia, hoy lo que hay es desesperación y prisa por llegar no se adonde; dedicación, la mamá se esmeraba en realizar las cosas para su familia, la cena por ejemplo, hoy ya no hay cena cada quien come por su lado porque todos tenemos cosas importantes y sobre todo había amor, ¿amor? Hoy no es más que una palabra de 4 letras que se la decimos a cualquiera, se ha perdió en el tiempo como se siente amar a alguien; sin mencionar que ya no queremos tantos hijos preferimos un perro o un gato porque molestan menos, pero aun así cuando vemos celebrar los 50 años seguimos diciendo “yo quiero ser así” aunque no conocemos quien tenemos a nuestro lado, realizando actos que nos marcaran toda la vida y no solo a nosotros, sino a nuestros hijos.

¿Se ha perdido todo? Mmm tal vez no, aunque rescatar el modelo familiar con el que crecimos requiere de mucha entrega y dedicación, por mi parte intentare  hacer lo mejor posible (jejej aunque me falten algunas piezas).

jejeje un poco de humor